. La Bahía de Mar: febrero 2007

jueves, febrero 15, 2007

PALABREANDO

La amistad, los repechos, el noctámbulo, las esferas, la maldición, latembladera, las cobrizas, la miseria, la piñata, el rapavelas, lasmoléculas, la inocencia, el desprecio, la mosca, el siroco, la víctima, eldescuido, los panteones, las morenas, el ejemplo, los metros, el poderío,los pánfilos, la brújula, los espíritus, el letargo, la fracción, lospatriarcas, el alma...

Posteriormente éstos, aquí, encima.

Despliegas, condescendiente, terso, rancio, análogas, memorias, inflamadas,captadas, movedizo, anaranjado, exterior, sangrante, rociado, maldecidas,infieles...

Después, quizá detrás.

Conjugando, sulfurándose, incendiando, agonizando, soportándose,coexistiendo, zarandeándose, arrimando, observando, auscultando,asentándose, sollozando...

Mientras tanto,

tan acaso,

tan lejos,

tan debajo,

tan nunca,tan tanto.

Lo aterrador, lo honorable, lo regio, lo flemático, lo huraño, lo vano, loazaroso, lo estremecedor, lo impregnado, lo indisoluble, lo puro, loirrevocable, lo umbroso, lo infernal, lo subterráneo, lo sensual...

Aquello invariablemente mañana,

siempre cuánto,

¡cuánto!...

el alma...

infieles...

sollozando...

lo sensual... ¡cuánto!...

---

©MAR 06/02/07

viernes, febrero 09, 2007

DESENTRAÑANDO LA PALABRERÍA

I

Si me vas a decir que en nombre de la amistad superaremos los repechos estás muy equivocado. El noctámbulo eres tú y las esferas se empeñan en girar impasibles, ignorando la maldición que trajiste a mi vida, la tembladera que me dobla cuando las cobrizas nubes amenazan, cuando convivo con la miseria de saberte, cuando sé que de la piñata sólo caerán mentiras que ni siquiera recogerá el ingenuo rapavelas. Ni las moléculas serán capaces de intuir la inocencia, sólo el desprecio. Eres como la mosca que jamás se extingue, ni el siroco se la lleva y la víctima del descuido solapa los panteones. Las morenas darán ejemplo surcando metros y metros de sargazos, demostrarán el poderío de los pánfilos, de los espíritus sin brújula, de la fracción de la luz, del letargo de los patriarcas, y de la leve pulsión del alma...

II

A pesar de todo te despliegas condescendiente. Te quieres mostrar terso y no eres ya el embaucador que dominaba mi mundo sino un rancio y pobre oprimido que con artimañas análogas a las de un monstruo pretende abolir mis memorias todas. Un ser que con arengas inflamadas miente a las masas captadas con el único y movedizo fin de llevarlas a un mundo anaranjado, situado en el exterior del mal -dices- Sangrante blasfemo, les conduces a un final rociado de maldecidas promesas y tú y tus sicarios les seréis infieles...

III

Conjugando sigilos seguirán sulfurándose, incendiando utopías, agonizando espejismos, soportándose,

-so-por-tan-do-se-

zarandeándose y coexistiendo, arrimando cada ascua a otra sardina y observando, auscultando incógnitas para continuar asentándose, sollozando...

V

Confusos, fusionamos lo aterrador y lo honorable, lo regio y lo flemático. Ambiguos congregamos lo huraño, lo vano, lo azaroso y lo estremecedor, mezclamos lo impregnado, lo indisoluble y aunamos lo irrevocable, lo umbroso, lo subterráneo. Y pretendiendo parecer enigmáticos aglutinamos lo infernal y lo puro, lo sensual...

VI

Seguidamente éstos, aquí, encima.

Sin decir nada más sin callar.

Después, quizá detrás.

Posiblemente arriba.

Mientras tanto, tanto acaso, tanto lejos, tanto debajo, tanto nunca, tanto tanto.

Aquello, lo primordial

S ecamente mañana

E videntemente mañana

G eneralmente mañana,

U nilateralmente mañana,

R igurosamente mañana

A uténticamente mañana

M anifiestamente mañana

E strechamente mañana

N aturalmente mañana

T ristemente mañana

E xactamente mañana

Se-gu-ra-men-te

Matemáticamente

Siempre cuánto,

¡Cuánto!...

¡Cuánto!...

---

©MAR

lunes, febrero 05, 2007

NOCHE Y DÍA

NOCHE Y DÍA

Al anochecer declinamos las armas,

merodeamos por nuestros íntimos espacios

y abandonamos la estirada conducta

de ejecutarnos sin mesura.

Al caer la noche no sé si mis decisiones

han sido las precisas,

ni siquiera sé, mientras me besas,

si han sido las adecuadas;

pero si te vas,

si te alejas y tu abrazo me falta,

ni siquiera recuerdo que tomé decisiones.

Al amanecer retomamos esa pose artificial

y volvemos a ser extraños animales

despojados de ternura.

Entonces nos miramos...

"como si atisbáramos un campo de secretos"

---

©MAR - 01/02/07